Tercera victoria consecutiva, también contra un equipo de la parte baja de la tabla, pero con mejores sensaciones que en los partidos anteriores.

Victoria cómoda para comenzar el año contra el penúltimo clasificado, en un partido tranquilo, controlado desde el primer momento y en el que el resultado nunca peligró, aunque eso no quiere decir que no siguiéramos cometiendo los mismos errores que en otras ocasiones.

En la última jornada antes del parón vacacional visitábamos hoy el pabellón del colista (bonito pabellón, por cierto), con cero puntos y una media de más de ocho goles encajados por partido.

Otro mal partido al que, por desgracia, se podrían aplicar los comentarios que hice con ocasión de nuestro último desplazamiento. Sin ideas en salida (y sin aplicar nada de lo que practicamos en los entrenos), con poquísima intensidad (lo que hacía que todos los rebotes fueran del contrario), y jugando a algo que no parecía fútbol sala. La única diferencia es que no encajamos los goles tan rápido, pero igualmente nos fuimos al descanso con un 5-1 en contra. Y de forma merecida.

Conseguimos el primer punto en casa en un partido con más entusiamo que juego, en el que hemos ido por detrás en el marcador por dos veces pero que, finalmente, hemos conseguido empatar.

Abultada, pero merecida, derrota en un partido contra un rival claramente superior tanto colectiva como individualmente, pero que regalamos con un inicio desastroso, encajando dos goles fruto de fallos propios en cuatro minutos (y no fueron los únicos) y en el que en el minuto diez ya perdíamos por 4 a 0.

Segundo partido en casa y segunda derrota por la mínima, en un partido con muchas similitudes con el jugado anteriormente. Un rival con jugadores intensos con buen físico pero a los que hemos plantado cara durante todo el partido, hasta el punto que el gol de su victoria ha llegado a cinco minutos del final.

Primera victoria de la temporada en un partido que hemos tenido controlado en todo momento y en el que, por juego y por ocasiones, hemos merecido ganar.

Después de iniciar la liga la semana pasada con una merecida derrota en un mal partido, afrontábamos hoy la segunda jornada contra un equipo que venía de golear 13-0. Por eso hemos afrontado el partido con prudencia pero sin miedo, y con mucha disciplina, que ha impedido al contrario (un buen equipo con alguna muy buena individualidad) desarrollar su juego, lo que nos ha permitido irnos al descanso por encima en el marcador pese al dominio contrario. Durante la segunda parte la tónica ha sido la misma, pero finalmente nos han remontado el marcador gracias a una jugada desafortunada con autogol y una muy buena jugada individual. Resultado justo, pero que hubiera podido ser diferente.

Acabamos la liga con una victoria cómoda en un partido tranquilo en el que, si bien jugábamos contra un rival en las últimas posiciones de la tabla, hemos mostrado un juego de ataque con combinaciones que, personalmente, he echado en falta en partidos anteriores, y que si hubiéramos prodigado más seguro que nos habría permitido estar más arriba.

Trabajada, pero justa, victoria en el último desplazamiento de la temporada, que hace la número doce y nos confirma matemáticamente en la séptima plaza, la misma que teníamos al finalizar la primera vuelta, y que no hemos podido mejorar (pero tampoco ha empeorado).